ahorro energético LED

Uno de los grandes beneficios de las bombillas LED y la iluminación LED en general, así como la pieza clave de la bandera, es el ahorro energético. Con numerosos estudios que lo demuestran, el ahorro energético proporcionado gracias a la iluminación LED puede llegar a un 80% en tu factura eléctrica.

La comparativa es llamativa. Teniendo la misma luz, o incluso de mejor calidad puesto que la tecnología LED no deja de evolucionar, podemos estar ahorrando este 80%. En un estudio con 10 lámparas LED en una casa podemos ver la diferencia.

10 bombillas incandescentes de 60W encendidas durante 7 horas al día tienen un gasto económico (en la tarifa eléctrica) de unos 15€ mientras que, 10 bombillas LED de 7W encendidas durante 7 horas diarias gastarán 1’8€, lo que significa un ahorro de más del 80%.

Paralelamente, este ahorro no lo notarás solo en tu casa, sino que también en el medioambiente puesto que cuanto más uso de LED implica menos uso de incandescentes y luz tradicional, con lo que menos recursos del planeta utilizados. De hecho, aun hoy en día la mayoría de las ciudades funcionan con la tecnología anticuada que solo el 5% se convierte en luz efectiva, mientras que el 95% de los recursos y la energía utilizada se disipan en calor, cuando con la iluminación LED es, al contrario.

También debemos saber que la iluminación LED no posee elementos tóxicos, así como sí lo hace la iluminación tradicional, como pueden ser el mercurio.

En cuanto al reciclaje también gana la batalla la iluminación LED contra la tradicional por dos grandes temas: el primero de todos es que la vida útil de la iluminación LED como las bombillas LED es mucho más larga que la tradicional, así que hay que generar menos y reciclar menos también. De hecho, las bombillas LED duran casi seis veces más que las bombillas tradicionales.

El segundo de los temas es que normalmente no contienen metales pesados ni materiales dañinos para el medio ambiente, así que el reciclaje es puro y real, sin ensuciar el planeta.

Finalmente, hay que destacar la eficiencia y vida útil de las lámparas led. Con poco consumo se consigue niveles de iluminación similares a los que consumen mucho más. El consumo de una luminaria LED, con igualdad de lúmenes de una incandescente es mucho mayor. La vida útil de una lámpara de bajo consumo suele estar entre las 6000 y 8000 horas mientras que las LED tiene una vida útil de hasta 50000 horas.

En conclusión, cambiar las luminarias a LED convierte a corto, medio y largo plazo. Los precios de estas bombillas han bajado mucho en estos años y lo puedes ver en nuestra web. Rentabilizaremos muy pronto estas bombillas teniendo en cuenta su larga durabilidad y su gran ahorro.